Teatro 8 2101 SW 8th. street Miami, Fl, 33135
Autor Laurent Baffie. Director Manuel Mendoza. Adaptación Julián Quintanilla
Elenco Esteban Villarreal, Adrián Más, Jessica Alvarez Dieguez, Gilda Haddock, Paloma Márquez, Karlos Anzalotta, Felipe Betancourt, Danly Arango
La Pequeña Habana por la noche, en compañía de amigos y mi esposa vamos dispuestos a disfrutar de una buena velada, lleno total en el Teatro 8, a mi lado butacas improvisadas, son pasadas las 8:30 pm y en cualquier momento la función comenzará, el público impaciente pero entusiasmado comienza a aplaudir para que inicie la obra.
El telón se descorre y nos encontramos con un hombre que rebasa ya más de los 50 años, de gesto afable con un portafolios sobre el regazo espera impaciente, se trata de Fred (Esteban Villarreal) un sujeto con un severo caso de síndrome de Tourette. A su derecha cinco sillas vacías, se encuentra en la antesala de un consultorio de Miami, a sus espaldas una ventana que asoma lo que parece la bahía de Brickell.
Algo me incomoda, unos estantes con libros desordenados, unos cuantos cuadros que invitan a enderezarlos, de manera intempestiva aparece un hombre corpulento, parlanchín, es Camilo (Manuel Mendoza) un taxista con una asombrosa habilidad para cálculos aritméticos, el teatro comienza con su magia. Fred y Camilo conversan, Fred dice ser un editor retirado, (“coño” entonces esto de lanzar improperios a diestra y siniestra de pronto tiene que ver con la profesión). Ambos esperan al afamado Doctor Cooper, eminente terapeuta especializado en trastornos obsesivos compulsivos.
TOC, TOC, nadie toca a la puerta, al consultorio entra Blanca (Jessica Alvarez Dieguez) en un pulcrísimo conjunto blanco que queda en perfecto tono con sus gafas obscuras, con gran recelo saca un coqueto plumero rosa y comienza a limpiar y desinfectar su asiento. La comedia ya está en pleno movimiento. No podemos evitar reir ante los inconvenientes de los TOCs de estos pacientes, menos mal que les sucede a ellos y no a uno, aunque no sé porque me siguen incomodando esos libros fuera de lugar.
Otra silla es ocupada por María (Gilda Haddock) la beata, se ha corrido la voz de las curaciones milagrosas del Dr. Cooper en Miami, al poco tiempo aparece la encantadora Lily (Paloma Márquez), quien parece buscar perpetuarse repitiendo todo lo que dice (ejercicio que sospecho debe requerir de una gran concentración del actor para que fluya con naturalidad y que logró con gran acierto). El último paciente en llegar es Pep (Karlos Anzalotta), gracias a Dios acomoda los libros y endereza los cuadros.
No sé cuántas veces hemos reído de buena gana, lástima que no tenga a mi lado a Camilo, seguro tendría la respuesta correcta. El tiempo pasa y no llega el Doctor Cooper, su sexy asistente (Danly Arango) informa a los pacientes que el Doctor demorará en llegar y aquí la obra da otro divertido giro, donde cada uno de ellos tomará el toro por los cuernos de forma lúdica y en grupo, ¿lograrán resolver sus problemas sin la ayuda del Doctor Cooper? Yo les recomiendo que asistan a ver la obra para que decidan por ustedes mismos, pero algo seguro sucedió, pues al salir del Teatro 8, Blanca (Jessica Alvarez Dieguez) nos agradeció nuestra asistencia y se despidió de mano de mi esposa sin correr a ir a lavarse, ah y por cierto, cuando vayan por favor pídanle a Pep que enderece bien los cuadros.
Nota: Fuera de bromas de último momento el director Manuel Mendoza suplió al actor Adrián Mas quien se encuentra hospitalizado, le deseamos una pronta recuperación, muy acertada la puesta en escena y su adaptación miamense.
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