TIERRA
Cascarón de roca,
kilómetros de profundidad,
mi agua se filtró por tus grietas
cuando la capa de escombros
era únicamente arena.
Este fue el primer suelo
sobre el que surgió nuestra vida.
Tierra negra,
agua y viento te arrasaron,
ahora,
dibujante suelo rojo
que deposita sedimento,
cosechas mi soporte
eres limo de bordes nítidos,
carne formada de arcilla
en mi centro
que es tuyo,
ésta, mi línea interior
en la que
tus cavidades se sacuden
anhelando el equilibrio,
propagándote desde la raíz de mi cabello
hasta las infinitas plantas
que me conectan con el cielo.
NÁYADE Y SU CANTO MAÑANERO
Con escamas y canto
y la melena revuelta,
así amanecemos las sirenas.
Una mañana aspiré borbotones de agua
los valles, las calles y las noches,
pintadas de azul
crecieron en mis labios
que, hablando en términos estrictos,
debieron causar mi muerte,
pero la gracia de un viejo dios marino
invocado por las vírgenes de los
patios traseros de cualquier vecindad del mundo,
bendijo mi nuevo cuerpo.
Mi madre gritaba: ¡cúbrete los pechos!
yo resplandecí abriendo el plexo
provocando el primer amanecer
en la calle abandonada de mi barrio.
Así fue como mi sangre
enfrió la cola tornasol
que corona el final de mi raza
Llevo una flor marina, delicada
sobre rizos verdes.
Y mi voz
produce los cantos más gloriosos,
pues en ella viven
los deseos de las mujeres
que no gustan de la sal de los mares.
Los llantos
de las que no aprendieron a nadar
por miedo a mostrar su carne.
La locura
de las que fueron sirenas
y decidieron regresar sobre sus dos piernas
para sortear las olas enfurecidas
que les arrastran a una desolada roca.
Mi voz también aloja
los silencios de un anciano
que pasa las tardes escribiendo poemas
a niñas que no existen,
los pestañazos de la oficinista
que no olvida
el primer beso de un tritón,
el que desapareció sumergido
en las vías del metro Hidalgo.
Y dos o tres odios
de aquellas
que no soportan
el atributo de la mujer impura
que frente al espejo
peina por horas una larga caballera.
Mi cola no es el emblema de promiscuidad;
yo amamanto a los héroes abandonados,
transporto sus almas
hasta el inframundo de alguna cantina
que ofrezca botana,
ellos estrellan sus naves en mis acantilados
y pocas veces,
según sea el caso,
los trago abandonando sus huesos
en la orilla de la banqueta.
Hoy amanecí sirena
y mis lágrimas no son perlas,
Hoy amanecí sirena
y las escamas de mi cuerpo
se desprenden fácilmente.
Por eso canto
despierto y canto.
FRUTO VERDE
I
Tienes razón, debajo de mi piel vive el espíritu negro de la melancolía de quienes gritan en los campos. Diablos azules se derraman de mis piernas, ellos se evaporan mientras un lamento brota cuando besas las melodías que viven en mi ombligo.
Me enseñas todo lo que debe saber una reina cuando acepta un encerrón en medio de la nada, bebiendo de mañana y fumando los alientos por la noche, rozando los amores que debían pertenecerle a mi madre. Pero la ausencia de brillo me excita, me incendia la lengua y los oídos. Saboreo tu barba blanca, escucho las voces del Mississippi.
II
Tres veces tu nombre en la oscuridad alimenta a los cuervos de mis ojos con una hogaza de luz y es, pues, cuando puedo verte como el gigante entregado al viento que te anuncia como el vencedor de la batalla.
La música del diablo nos acompaña, bailamos, mi piel relampaguea, tocas mis notas más bajas, abandonas el título de poeta para convertirte en el hombre que recorre el camino de las aves que crearon el mundo.
III
Todavía me desnudaría para ti en el oleaje del desierto. Sudando entre tus brazos, quemada por la arena que cubre un fruto que se niega a madurar.
© All rights reserved Maya Lima
Maya Lima Rodríguez (México D.F. 1973). Poeta y cuentista, lectora en voz alta y promotora cultura. Ha participado en talleres bajo la dirección de Eduardo Saravia (México) y Félix Luis Viera (Cuba). Participa en la compilación de poesía erótica Iberoamericana 2010 titulada: “Garage 69”( editorial Cascada de Palabras Cartonera, 2010). Antología Erótica: ”Poesía del siguiente orgasmo”(Amarillo Editores 2010). “La Tierra de en medio”, patrocinado por la Casa del poeta José Emilio Pacheco,( 2011). Ha colaborado en la revista “Vicio Perpetuo” de Lima Perú, en la revista “Trajín Literario”, Revista “Frontera Esquina” y en la revista OPCIÓN del ITAM. Participa en la antología “punto&aparte” (Lima, Perú 2012). En la edición conmemorativa para el festival internacional de poesía Grito de mujer, “Poesía rebelde” 2011 y “Libertad, en mi cuerpo yo decido” 2012. En “Palpar” Ediciones EISEKE, Granada, España 2012, en “Letras de Babel5” (aBrace editora, Uruguay 2012), en “Adicción bajo los efectos de la creación artística” (Instituto para la atención y prevención de las adicciones en la Ciudad de México, Gobierno del D.F., 2012). “Amorvoz” (Editorial Morvoz 2012). En “La República en la voz de sus poetas” 2012 y “Cantar bajo la nieve” Toluca 2012. Es integrante del Colectivo Entrópico donde participa como compiladora y correctora en las diversas publicaciones del mismo.
Es una de las fundadoras e integrante del grupo “Cabaret poético” (Performance poético de burlesque), con el cual se presenta en diversos foros de la ciudad de México.