THE END OF THE WORLD. Leonid Rotar
Conde Contemporary Gallery . 204 Miracle Mile Coral Gables, FL 33134
Stacy Conde Director
“Pero lo malo de este mundo, y de todo lo que ofrece, está por acabarse.”
(1 Juan 2:17)
“Individuo y luz lunar”. Posiblemente este sea el tema principal de esta exposición que tiene por título: El Fin del Mundo. Una frase, de por sí, bíblica y muy ligada a la muerte o a la última etapa del Fin. Una oración en cada uno de los siete cuadros que se compone la exposición. Y que hace referencia a la Apocalipsis. De hecho, el ser humano siempre ha reflexionado, no solo sobre la desaparición de sí mismo, sino también sobre la posible destrucción del planeta Tierra.
Otros significados simbólicos también irían afín con “infancia o juventud y la noche”. La oscuridad siempre está presente en estás impresionantes telas. Todo ocurre al caer el día. Todo sucede frente a la reflexión o la duda de un individuo; para ser precisos, de uno solo. Unas veces frente a una luna enorme e imposible como en Until Tomorrow. Un astro en plenilunio que ocupa todo el espacio planetario. De espaldas, un niño, que si bien no podemos ver su rostro, intuimos el impacto meditativo que le provoca la luminiscencia que percibe.
Otra tela aparece frente a una cruz iluminada por el mismo reflejo que da el Sol en el satélite Blinding Light. El chiquillo parece agarrarse para no caer. Y a la vez, hay como un acto de acogida a la piedra santa que rememora a Cristo. Inocencia y satisfacción para un posible rescate, en caso de que la Apocalipsis suceda al instante. Felicidad y una mirada dirigida a quien no pierde su atención para transmitir su goce por estar a salvo.
Soledad y fin, posiblemente, el que crea estar más cerca de nadie que de uno mismo. Un palo iluminado en el cuerpo de un joven meditabundo. Y una mirada de rabia y venganza por lo que puede ocurrir en Order. En este caso, un registro distinto a los otros dos. Parece que se dirija a un demiurgo, o al asesino de un paisaje que hubo antes que desapareciera. La muestra de un desconsuelo, por no poder contemplar aquella naturaleza en la cual creció.
El mundo era eterno para los griegos. En tiempos de Pompeyo todo los ciudadanos invocaban a los deidades para buscar respuesta en sus templos. Virgilio habla del miedo que tuvo a que viniera una “eterna noche” que ocupara sin fin el Universo. Ovidio ya hablaba en la Metamorfosis de un diluvio infernal que eliminaría los cuatro elementos naturales, e incluso los palacios de los dioses.
Leonida Rotar no hace filosofía en sus planteamientos visuales. Desde un plástica formal ligada al cartoon y desde un realismo cercano a Edward Hopper o Claudio Bravo, el artista quiere evocar el momento místico que conlleva el pensar que algo puede suceder. Aquel “algo” que en cualquier generación está presente entre sus pensadores. Lo inherente en el ser humano: la desaparición de El Todo. Es decir, no solo la biosfera en sí, sino también el que la piensa…o simplemente el que la observa a través de su Luz. ER
Nota Para ver las obras de la exposición completa puede dirigirse al link de la exposición https://www.condecontemporary.com/leonid-rotar/