6 ¿Crees que existe un Miami y sus vecindades completamente distinto al Miami que por lo general se conoce? Si es así, ¿cómo es ese Miami que se le escapa a los
medios noticiosos o plataformas de promoción turística? ¿Crees que hay hechos históricos que se produjeron en el área que parecen haber sido olvidados? Para un grupo de lectores ávidos, ¿podrías elaborar en algunos de esos acontecimientos que consideres importantes?
Sí, lo creo, y creo que todos los que vivimos aquí o hemos experimentado la ciudad de primera mano, lo sabemos. Toda ciudad tiene dos caras, la del turista y la del que vive en ella. Eso no sólo ocurre en Miami, ocurre en New York, en París, Londres, Medellín, Buenos Aires. El turista está de relajo y de paseo, en ese estado, toda ciudad es superficial; el problema con Miami es que, desde sus inicios, allá por el año 1900 +, cuando empezó a hacerse la ciudad, se le vio como un paraíso frente al mar, para ricos, y no se le ha podido borrar esa estampa. Eso ya no es así, hoy Miami es una ciudad movida por una masa enorme de clase media, donde sus habitantes luchan por una segunda oportunidad de vida (la primera la quemaron en sus países) y por llegar a fin de mes. Uno de los grandes problemas de Miami es que no sabe mantener o cuidar su historia, por eso se suele creer que no la tiene, incluso los mismos habitantes nacidos acá lo creen así. Pero eso no es cierto, Miami tiene mucha historia y muy interesante.
Aquí murió Bob Marley y no por algo circunstancial, sino porque él y su familia vivían acá (su familia aún vive acá), también el último gran concierto importante de la banda de The Doors fue en Coconut Grove y aquí nació el festival de música de Woodstock. Estos son solo tres acontecimientos que bien podrían marcar la cultura popular de la ciudad, al menos más que el paseo en bote, desde Bayside, por las casas de los famosos. Sería interesante, además, rescatar la historia del desarrollo de la ciudad, me refiero a cómo nacen, por ejemplo, las ciudades de Opa Locka, Hialeah, Coral Gables, Miami Beach, que tienen unas historias fascinantes detrás. Y estos son sólo algunos temas relevantes de los tantos que se podrían conocer más a fondo.
7 Eres responsable de la creación del portal suburbano.net, donde hace años tuve la suerte de publicar algunas de mis creaciones. Tras conversaciones con lectores amigos que la conocen, me consta que esa página ocupa un lugar de importancia en la cultura hispana de los EE UU, particularmente en el énfasis a las experiencias del inmigrante. ¿Sería un tanto arriesgado de mi parte decir que estoy muy de acuerdo con ese criterio? ¿Qué opinión tendrías tú al respecto?
Estoy de acuerdo. Cuando nace Suburbano, hace más de doce años ya, una de las ideas que la impulsaron fue abrir una puerta para que los escritores y artistas hispanoparlantes afincados en Miami y Estados Unidos se expresen, aunque claro, también siempre existió como canal abierto para creadores de Latinoamérica y España y de esta manera tender un puente entre España, Latinoamérica y Estados Unidos. Y aquí el cruce con lo que mencionas arriba, sobre “el énfasis a las experiencias del inmigrante”. No es una regla y no se puede afirmar que toda expresión artística de un inmigrante esté atada a su experiencia con la inmigración, pero sí es cierto que en buena parte de su producción artística está implícita su condición de inmigrante, como en el uso del lenguaje, por ejemplo. Entonces, desde ese enfoque, Suburbano es un “refugio” para los artistas inmigrantes, porque la gran mayoría de los colaboradores o de quienes se han expresado en ella, son inmigrantes.
Pero bueno, saliendo de la génesis del proyecto, hoy Suburbano ha trascendido y es un referente de la cultura iberoamericana en español en Estados Unidos. No solo por el portal suburbano.net sino también por el papel que cumple la editorial que se desprende de Suburbano y que se llama Sed (Suburbano Ediciones) y creo que se debe a que desde sus distintos frentes de batalla, Suburbano ha sabido llenar espacios vacíos. Por ejemplo: la editorial nace para darle voz a los que escriben en español en Estados Unidos, ese es su eje, darle el lugar que necesitan, porque viviendo en un país con más de cincuenta millones de hispanoparlantes, son mínimos los sellos editoriales, y de hecho cuando surge nuestro sello, eran menos aún. Y es aquí donde suburbano como revista cobra un especial valor, porque la revista ha sido, en todo momento, un termómetro para ir midiendo las necesidades de la gente.
8 Noto que compartimos el mismo alma mater. Esto me da la oportunidad de cambiar un poco la temática. Siempre se asocia la afición a la escritura con la afición al libre pensar. Si tuvieras el poder de cambiar ciertas cosas en la arena de los estudios literarios y en la conceptualización de los temas a tratar tanto en la poesía y la narrativa como en el arte de escribir ensayos, ¿qué sugerirías? En el aspecto de la cultura o culturas en general y en la experiencia tuya en particular, ¿qué temas relacionados con la situación de los que se ven obligados a emigrar por distintas razones incluirías en esos cambios? Si ese el criterio que compartes, ¿en qué basarías tu tesis? ¿La incluirías en tus futuros trabajos?
Quizá cambiaría, o agregaría, cursos específicamente sobre literatura en español escrita en Estados Unidos. Hay muchos libros, muy buenos, que se están publicando actualmente en el rubro que te menciono, pero no llegan a las universidades, y aquí tenemos un par de puntos importantes de por qué deberían leerse por los estudiantes. Primero, porque el escritor es un testigo de la realidad, así que, en muchos casos, un lector, dígase estudiante, se va a encontrar realmente identificado con lo que está leyendo en esas páginas. Entonces, en ese sentido, el libro como documento de su época, es importante. Lo segundo es que, en Estados Unidos, la academia pesa mucho, me atrevería a decir que todo se termina de legitimar con la venia de la academia, entonces, en ese sentido, la literatura en español que se escribe en este país, necesita ese espaldarazo desde la docencia para realmente ocupar el lugar que se merece frente al resto de satélites literarios en nuestro idioma como lo son Latinoamérica y España. Y ahora bien, no sé si me estoy desviando de la pregunta, pero algo que también crearía en Miami, que lo considero urgente, es una maestría en Escritura Creativa en español, como las de NYU o Iowa, por ejemplo. Me parece inaceptable que Miami, siendo la capital del español en Estados Unidos, no tenga uno de estos programas. En fin: creo que, desde lo académico, aún hay mucho por hacer a favor de la literatura de nuestro idioma.
9 Tu trabajo como escritor abarca una amplia gama de géneros. ¿En cuál de ellos te sientes más cómodo? ¿Podrías elaborar un poco en la motivación ulterior que te ha impulsado a escribir lo que hasta ahora has publicado y lo que están por publicarse? ¿Cuál es tu agenda para los próximos 24 meses?
Me siento cómodo escribiendo, cada género tiene sus encantos y desafíos. Pero por lo general, si escribo una novela, es porque en ese momento siento que mi lugar en la literatura está en la novela y no en otro género, y lo mismo cuando escribo cuentos o crónicas. Con este último registro, el de la crónica, tengo una relación muy particular porque sin planteármelo mucho, de un momento a otro, empecé a escribir crónicas breves sobre cultura popular de la ciudad de Miami, desde sus inicios, hasta nuestros días, que se publicaban en el Nuevo Herald y que luego terminaron convirtiéndose en un libro, el primer y único libro, a la fecha, que hace una panorámica de la historia de Miami, nuestra ciudad. Hago énfasis en lo de “nuestra ciudad”, porque aquí vivimos y la conocemos poco y no solo eso, sino que, en general, al miamense promedio hispano o latinoamericano (no al anglo, ojo), le interesa poco conocer y profundizar en los anales de la ciudad. Entonces, ese libro en el que aparecieron esas crónicas, que lleva el título de Tour: una vuelta por la cultura popular de Miami, y que abarca desde los pasos de Henry Flagler y George Merrick hasta los de Bob Marley y The Beatles en la ciudad, considero que es mi pequeño homenaje en agradecimiento a este lugar que me abrió sus puertas hace casi dos décadas y que se ha trazado un justo camino en la comunidad, pues son incontables las invitaciones que surgen constantemente de cualquier punto de la Florida y de otros estados, para dar conferencias sobre estos temas; de hecho, es a raíz de Tour: una vuelta por la cultura popular de Miami que la institución Florida Council Hummanities me incluyó en su staff de conferencistas en temas relacionado a cultura popular de Miami (a la fecha soy el único no anglo de ese plantel).
Pero bueno, yendo concretamente a lo que mencionas sobre los géneros, creo que eso ahora está cada vez más desdibujado, y entre todos se nutren. En mi caso, por ejemplo, acaba de salir publicada mi nueva novela, Callejeros, un texto híbrido, sui generis, en el que me permito jugar con el diario y otros registros como la crónica, en el que cada capítulo son fragmentos breves, como polaroids, con fechas específicas, de las memorias de un inmigrante durante sus últimos días en Lima y sus primeros en Miami. Y esta licencia narrativa me la permito, precisamente, porque ahora las fronteras de los géneros son mucho más permeables, quizá hace veinte años no hubiera escrito un libro así.
- ¿Cuál es tu agenda para los próximos 24 meses?
Para los próximos meses estoy trabajando en una novela titulada Bandidos, donde una parte de la historia transcurre en el Miami nicaragüense de los años 80 y su nexo con las fuerzas contrarrevolucionarias sandinistas. La otra parte de la novela surge en tiempo presente, y tiene como personaje principal al Comanche, que es un ex inspector privado que ya he puesto en otras novelas en las que se dedica a explorar el lado marginal de la ciudad. El anterior libro de esta saga, se titula Americana y también corre en dos épocas: una en tiempo presente, en la que el Comanche investiga un caso de estafa en la Pequeña Habana y otro en el pasado, donde un grupo de cubanos jóvenes, a fines de la década del 50, ayuda a financiar a la revolución cubana desde un “chalet de la Pequeña Habana”. El primero de estos libros, lleva el nombre de Varsovia y fue ganador del Florida Book Award, y en él, el Comanche investiga el asesinato de una aspirante a actriz pornográfica en Miami Beach. Miami me parece muy interesante para ambientar libros, hay mucho choque cultural y a lo largo de la historia, la ciudad ha sido un escenario muy interesante social y político que, creo, se podría explotar más desde lo literario. Aquí me refiero básicamente a la literatura en nuestro idioma, porque en inglés, el autor anglo sí que le ha dado grandes e importantes novelas.
En mi labor como editor, me encuentro preparando la antología Noir Tropical, en conjunto con los editores Gastón Virkel y Hernán Vera Álvarez. Soy de los que ven a las antologías como documentos, como vehículos para dejar un precedente de algo que se viene dando en lo literario. Entonces, este nuevo proyecto, Noir Tropical, busca rescatar desde el español, la tradición literaria que tiene Miami. Me explico: a lo largo de las décadas (miremos hacia 1920’s) la literatura que ha predominado en la escena miamense ha sido la noir. Estamos hablando de lo anglo, en aquellos años no existían autores en nuestro idioma en Miami. De modo que desde sus inicios literarios, en esta ciudad ha predominado el género noir, pero sin callejones oscuros, como en New York o Los Angeles, si no que ha sido una literatura del género, pero con grandes puestas de sol, con cocktails, con colores pastel (recordemos los años 80 y su utopía alrededor de Miami Vice). Pues bien, desde hace unos años que una buena parte de la literatura en español que se escribe desde Miami, también apunta hacia esos horizontes y nos son pocos los autores que toman a Miami de escenario para sus ficciones, como una atmósfera muy marginal, mostrando el lado menos glamuroso de ella, tal es el caso de los autores Rodolfo Pérez Valero, Anjannete Delgado, Xalbador García, Uva de Aragón entre otros tantos, que han escrito páginas con asesinatos, robos, choques culturales y mucha violencia bajo las palmeritas de Miami Beach o Coral Gables. La premisa de esta nueva antología, Noir Tropical, es la siguiente: ¿qué tiene Miami que a muchos nos hace retratar su lado más sórdido, más violento?
Fin de la parte II. Sírvanse leer la PARTE I, publicada el 1ro. de junio, para una versión completa de la entrevista.
© All rights reserved Héctor Manuel Gutiérrez.
Héctor Manuel Gutiérrez, Ph.D., es instructor de español avanzado y literatura hispana. Funge como Lector Oficial de Literatura y Cultura Hispánicas en el programa de evaluación superior Advanced Placement, College Board/ETS. Colaborador mensual de la revista musical «Latin Beat», Gardena, California. Miembro/fundador de la revista literaria «La huella azul», FIU, Miami, Florida. Editor de contribuciones, «Revista Poetas y Escritores Miami», Miami, Florida. Colaborador «Revista Suburbano», Miami, Florida. Colaborador/ columnista, «Nagari Magazine», Miami, Florida. Colaborador, «Insularis Magazine», Miami, Florida. Es autor de los libros: Cuarentenas, AuthorHouse, marzo 2011, Cuarentenas: Segunda Edición, AuthorHouse, Junio 2015, Cuando el viento es amigo, iUniverse, 2019, Dossier Homenaje a Lilliam Moro, Editorial Dos Islas, 2021, De autoría: ensayos al reverso, Editorial Dos Islas, 2022, Encuentros a la carta: entrevistas en ciernes, a publicarse en 2022, La utopía interior: estudio analítico de la ensayística de Ernesto Sábato, a publicarse en 2023.