A mis amigos íntimos de América
A los catalanes de Miami.
Hagan la traducción a un cocido de carne con sopa de galets (guijarros como pasta) de primero que comemos los catalanes el mismo día de Navidad al mediodía y no en Nochebuena como en la cultura peninsular.
En aquel entorno, un arbolito con adornos de bolas cristalinas y cintas brillantes alrededor. Un poco de harina blanca de trigo para imitar a la nieve y a un supuesto paisaje montañoso donde uno no habita. Bajo el mismo, un “cerdito” con patas improvisadas sosteniendo el tronco y una barretina (boina) surtido de regalos envueltos en papel rojo con nombre propio escondidos tras una manta donde los niños cantan esta canción y le pegan en el trasero
Caga tió
avellanes i torrons
no caguis arengades
que són massa salades
caga torrons que són més bons
Caga tió
de mel i mató
si no vols cagar
et donaré un cop de bastó, ben fort, ben fort…
*Caga tió (que no “tío” / almendras y turrones/no cagues arenques/que son muy salados/caga turrones que son más buenos/…Caga tió/ de miel y requesón/ si no quieres cagar/ te daré bien fuerte con mi bastón.. bien fuerte, bien fuerte.
Nadales, villancicos como eco haciendo alusión a Jesús. El abuelo, presidiendo la mesa junto a su esposa, lo único, que en sentido contrario a su rostro. La madre, cubriendo los detalles finales mientras ojea la mesa desde la cocina, a ver si falta algún detalle. El padre, dando bienaventuranzas a los asistentes y controlando a los hijos y a sus invitados en su quehacer festivo. Al lado, un pesebre con el niño en su cuna. Los reyes magos circundando el hogar con una estrella de cartón-plata en el techo mientras San José y la Virgen María contemplan el monte, los pastores y un rebaño frente a la luna llena. En el lugar menos indicado…un caganer(un pastor haciendo sus necesidades fecales). Sí, lo repito esta figura, sí o sí, está en la escena del nacimiento dando un punto de “distinción” y cotidianidad medieval en el momento que se descubrió hacia el siglo XIV en las famosas montañas de Montserrat de Catalunya.
Un Belén sin caganer es como un McDonalds sin hamburguesas o un concierto sin cerveza: un sinsentido en nuestra cultura. Dice Pilar Fernández en el blog de Barcelona Secreta.
La comida llega a la mesa. El olor fresco del caldo permite una dulce niebla en el comedor donde todos comentan el suceder del año y sus bienaventuranzas. De segundo, una plata con la morcilla, el chorizo, las manitas del cerdo, la rodilla de ternera, la botifarra (salsicha) negra, las patatas, el nabo, los garbanzos, la zanahoria…Todos los ingredientes para la sopa y sin faltar: la famosa pilota (la pelota). Secreto que, cada familia guarda, a la hora de picar la carne de distintos animales de granja para darle un sabor notable y único.
Foto. Mónica Cánovas
Bien nada mejor que alzar en la despedida una copa de cava (champaña) mientras los turrones de Agramunt de coco, chocolate, yema, o mazapán se encuentran sobre la mesa entre conversaciones sobre el hecho de existir, la situación del país, o la añoranza por quienes ya no están junto a nosotros en la mesa.
Un buen año para ustedes …que nos aleje de la guerra y el malvivir postpandémico.
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Eduard Reboll Barcelona,(Catalunya)