Elogio porque soy mis audaces moléculas
que pocas en mí entretejen un cuerpo hecho de tiempo;
canto escaso, pero alarga el dedo poderoso en busca
de otra carne.
Y no es gozo ni es tristeza sino
éxtasis de vida.
¿Qué ha sido del otro? Elogio la arrojada venganza—aunque lo inevitable
no merezca elogio;
acepto mi aplauso por luchar contra él, desconocido
enemigo.
Y esto sí, esto sí es gozo:
sé que me busca en la sombra que las sombras tejen;
que mi insignificancia es su alma;
que no puede mi enemigo sin mí;
que no puede borrarme, aunque no sea yo más que estelas borrosas;
que no puede acabar conmigo porque escondo
el ojo que soy desde la oscuridad.
© All rights reserved Francisco Larios
Francisco Larios, nicaragüense. Ha publicado los poemarios Cada Sol Repetido, anamá Ediciones, Managua, Nicaragua, Noviembre del 2010, The Net in Sight/La red ante los ojos, Editorial Rascacielos, Quito, Ecuador, 2015, La Isla de Whitman, Editorial Buenos Aires Poetry, Argentina, 2015, Sobre la vida breve de cualquier paraíso, Editorial 400 Elefantes, Nicaragua, 2017, más la plaquette bilingüe (inglés/castellano), Astronomía de un sueño/Astronomy of a Dream, Carmina in minima, Barcelona, 2013. Seleccionó y tradujo al castellano Los hijos de Whitman – Poesía norteamericana en el siglo XXI (Valparaíso, México, 2017). Tradujo también el libro, ganador del Pulitzer, 3-Sections (2013) del escritor estadounidense Vijay Seahadri [El sol detrás de la neblina, editorial Vaso Roto, España/México, 2019]. Escribe también narrativa y ensayo; maneja un blog [Ciudadanoequis.org]; es fundador y coeditor de Revista Abril [revistaabril.org]. Su poesía ha aparecido en revistas digitales e impresas en numerosos países y ha sido parcialmente traducida al italiano, griego, rumano, estonio e inglés.