“Un puñado de relatos”, así describe en ocasiones este libro su autor Pedro Medina. Relatos que buscan retratar el otro Miami. El que habitamos más allá de las rosadas puestas de sol.
Los protagonistas de las historias de Mañana no te veré en Miami son inmigrantes de diversas partes de latinoamérica: peruanos, mexicanos, cubanos, argentinos, venezolanos que han arribado a puerto (indocumentados o no) y cuyas historias se entretejen en una madeja que se deshace en un continuo ir y venir con salidas forzadas o retornos voluntarios al terruño.
Si bien cada relato puede leerse de manera autonóma, la forma en como se ha construido este libro bien puede aproximarse a la novela breve.
Las vidas de los diferentes personajes se entrecruzan a través de la mirada de un inmigrante peruano que trabaja en una empresa de envíos internacionales y con una manifiesta pasión por la lectura.
Un poeta mexicano vaga por las calles de South Beach, una jinetera cubana brinca de la Habana a Miami y Nueva York para satisfacer los deseos de un cliente que gusta de escuchar la música de un tal “chaicosqui”. Una joven peruana se involucra en la escena musical de Miami para finalmente devolverse víctima del tedio y el hartazgo, son tan sólo algunos de los retratos que nos ofrece este libro.
Para los iniciados, Pedro Medina hace una serie de guiños respecto a la vida cultural de Miami fuera del mainstream. Referencias a libros obligados para comprender la ciudad de Miami tales como Going to Miami de David Rieff o Miami. Turistas, colonos y aventureros en la última frontera de America Latina de Hernán Iglesia Illa.
El título delata una realidad que acecha de forma constante al habitante de Miami, la incertidumbre de una residencia fija, citando el haiku de Lidia Elena Caraballo en “Miami las raíces son aéreas.”
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