La vacuna
Definición en Wikipedia
Una vacuna es una preparación destinada a generar inmunidad adquirida contra una enfermedad estimulando la producción de anticuerpos.1 Normalmente una vacuna contiene un agente que se asemeja a un microorganismo causante de la enfermedad y a menudo se hace a partir de formas debilitadas o muertas del microbio, sus toxinas o una de sus proteínas de superficie.
Hemos utilizado el término como metáfora de protección hacia cualquier cosa mundanal. Un procedimiento para aminorar un deseo impropio; incluso, impuro.
Tienes que vacunarte contra este apetito desmesurado que tienes hacia Rocío… No te llevará a ningún lado si sigues así. ¡Bórrala de tu mente!
Símbolo del remedio. La medicina que curará, no sólo en el momento que aparezca la enfermedad bajo la insignia de la pasión, sino que por largo tiempo cubrirá tus espaldas ante lo lóbrego. Renacerán anticuerpos en ti que no permitirán acercarte a este ser, fruto de la humedad que lleva impreso su nombre.
Lo mejor contra la Rocío es… que el alba nazca en ti. El olvido puedes inyectártelo ya – le decía mi tía Dolores a su primogénito.
La eficacia de las mismas, hoy por hoy, tiene su corolario en un sinfín de enfermedades conocidas por todo el mundo: la gripe, la varicela, la poliomielitis, el sarampión, la rubéola, el tétanos… incluso una que adopta por término: la rabia.
Este sentimiento, en la actualidad, está muy expandido. La rabia deja de ser un virus intrasanguíneo para desfilar en tu cerebro y convertirse ser una huella contenida. Lo que vive el ser humano en este momento es un giro de su normalidad cotidiana. Al punto que, aquí, en la Península Ibérica el presidente Sánchez ha antepuesto el término “nueva” a la situación que hoy vivimos para definirla como: La nueva normalidad.
¿Hay vacunas contra ello?
La psicología conductista sugiere que nuestra actitud, hoy más que nunca, sea sumamente positiva ante el coronavirus. Los freudianos siguiendo el curso de su origen, proponen aplicar el principio de realidad. Los más religiosos anteponen la fe en ti mismo y, si ésta falla, siempre queda la respuesta bíblica: “Fue la voluntad del Señor”. Hay los más naturalistas que aplican un mejunje de hierbas del campo como solución anticovid. Y los más libertarios -a elegir el lado político de los extremos entre izquierda y derecha- afirman que todo es una ficción. Van con la boca abierta y, desde la potencia de su voz, salen a la calle para mostrar su protesta ante un supuesto engaño “para que el Estado nos controle”. Pero yo conozco a uno que, desde el micrófono de la Casablanca y sobre un tupé bien afilado y rubio, afirma que el virus tiene raza y que lo mejor es declararle la guerra. No comments.
Pues bien, si es chino, aquí están ellos como los primeros en desarrollarla por el Instituto de Biotecnología de Pekín y la biofarmacéutica CanSino Biologics; dicen que tiene forma de lanza para agujerear el globo celular del virus. Amén.
Mientras enero no se aparezca en el calendario bajo el signo del 2021, estaremos expuestos al patógeno. Los abuelos de las residencias tendrán que decidir si la muerte les llega por la sangre o la soledad que padecen debido a su aislamiento. El grito o la emoción desde la platea que forja en escena una representación teatral, el movimiento que evoca la danza, o los porqués contenidos en una película, esperan su turno. También una cena afable con tus contiguos…o el simple hecho de destapar nuestros labios por la calle para saber donde reside la atracción del otro o la libertad bajo palabra.
Hoy más que nunca: ¡Pónganse de acuerdo políticos del mundo! Sean justos con todos los estados. La ciudadanía espera impaciente estos anticuerpos diluidos dentro una aguja en el brazo …para regresar a la cotidianidad que nos une como sujetos.
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Eduard Reboll Barcelona,(Catalunya)