El sentido de pertenencia es aquella sensación de afecto que al ser humano nos une de cierta forma con nuestras querencias, sean estas de familia, de lugar o de sentimiento hacia algo o alguien y no debe confundirse con aquello que llaman el apego. De los objetos preciados que atesoro de mis progenitores son: la colección de fotos que mi madre tenía en casa, y de mi padre una cantidad de cintas de video 8mm junto con el proyector Arrow, modelo S-5, todo esto perfectamente conservado y funcional.
No soy la única persona que se maravilla con estos objetos encontrados, también le gustan las fotos y las escenas familiares a una joven creadora que en este espacio les presento: Paz Bardi.
A la hora de empezar una obra, ella enfrenta su lienzo sin ninguna moderación, respecto a los colores que elije para plasmar el momento o la escena que aparentemente ha captado con alguna lente. Acciones que deben haber ocurrido en su entorno, las ha dejado materializadas en un “para siempre”, sobre la tela blanca o el papel.
Esta artista tiene piezas producidas en un ambiente, donde por lo general los lugares elegidos reflejan momentos de esparcimiento entre familiares o amigos. Sin embargo, no será esto una limitante de su obra. Allí podemos ver chicos disfrutando ratos de ocio y actividades grupales de relajación, pero también escenas estructuradas que dan la impresión de querer insinuar cierto mensaje, como apreciamos en algunas de las piezas de la serie Caza de conejos o El equipo de natación.
Paz Bardi elabora retratos de sus amigos, familiares y autorretratos, que al juntarlos, será la mutualidad que formará parte de alguna de sus historias, hechas serie.
Estas piezas tienen una fuerza que adicionalmente, queda robustecida por la forma en que la artista maneja la perspectiva y los contrastes del color, arrojados descaradamente sobre el lienzo.
Al observar cada uno de estos cuadros he notado en ellos, cómo ciertas sensaciones se van juntando en densas capas, las mismas que luego terminarán unidas de manera repetida, en cada historia. Los materiales y detalles simbólicos —de gran importancia para la creadora— que se distinguen a través de la forma y sus combinaciones, nos obligan a interpretar todas las piezas por separado, en la búsqueda de un entendimiento hacia la autora y su trabajo.
En estas colecciones muy teatrales, la artista elabora con cada serie, una especie de libro o álbum de crónicas para contar. Presenta con frecuencia los autorretratos de ella misma y su entorno, resaltando estados de animo para cada repertorio.
Los placeres de la vida. La vulnerabilidad del ser humano y conductas adquiridas para conectarse con el exterior, son los criterios que coexisten en las imágenes de estilo tanto cándido como visceral de la obra. Narraciones que percibimos en el diario visual de la autora y a pesar de que ella cambia los escenarios, dichas imágenes permiten la conexión que la artista busca: los intérpretes y el espectador pueden negociar roles como un momento público o privado, adentrándose en el deseo circunstancial que pudieran tener. Como tomarse a sí mismo una fotografía y luego retenerla para que a través del tiempo, decodifiquemos su significado.
Yo en mi espacio y motivada por este encuentro, iniciaré un paseo por las postales y episodios retenidos en el tiempo joven de mis padres, haciendo retrospección y tratando de entender que los motivó a guardar esos instantes y no los consecuentes.
Gloria MiládelaRoca
Contacto con la artista:
Paz Bardi
(54)1124680858