El origen y el que resta del planeta Tierra
La primera vez que vi unas fotografías de Sebastiâo Salgado fue un domingo cualquiera de 1986. El País, en su edición semanal, sacó un reportaje sobre los garimpeiros de Sierra Pelada. Recuerdo el atraganto que tuve con mi café-con-leche de entonces y por el mix emocional de aquellas imágenes. Unas tomas donde miles de seres humanos cubiertos por el barro del lugar, la avaricia, la impotencia por huir de su situación y una fantasía en sus cerebros, esperaban amontonados y en fila, encontrar el oro que les iba a sacar de sus miserias personales en pleno año1986 en Brasil. Unas fotografías en blanco y negro donde se mezclaba una extraña sensación espiritual: la piedad ante la pobreza allí mostrada y, a la vez, una belleza exquisita por “el detalle textural de la miseria”. Un binomio que en más de una ocasión me ha hecho plantear el porqué aparece la culpabilidad en mí… cada vez que las veo.
En 1944, nace en Aimorés, en el estado de Minas Gerais de Brasil. A los 23 se enamoró de Lélia Deluiz Wanick y juntos siguieron sus estudios de economía. Primero en Sao Paulo, a continuación en París y después aterriza en Londres. Allí trabaja de economista en la Organización Internacional del Café donde abandona su profesión para dedicarse en carne y hueso a sostener la cámara fotográfica y observar el mundo desde sus lentes. Trabajó de freelance para Gamma, Sygma, Magnum Photos. Y consagra su atención personal a la gente que tiene menos recursos del planeta. Hechos por la cual es hoy re/ conocido. “Quisiera que cada persona que viera una de mis fotos fuera, luego de verla, una persona diferente” dijo en una ocasión.
En Génesis divide la muestra en cinco partes. La Antártida es un resumen gélido y vital de un continente que va perdiendo su hielo a pesar que sus habitantes naturales, la gaviota, la foca, la morsa, o la ballena dejan su huella a través de su hábitat. Hay una pieza formada por un masa de hielo con un arco en su base en forma de fortificación que resume con su desnudez, la belleza extraña de aquel territorio a través de sus cielos. Santuarios, como su nombre indica, son espacios naturales sagrados que el planeta Tierra guarda en sus adentros dentro de este 46% puro que aún nos queda. África es un retrato más humano que paisajístico donde Salgado recoge y detiene su cámara para captar dos estéticas: la que dan los individuos que pueblan mayormente la selva bajo su desnudez anímica y corporal y la estética inherente en el momento captado del retrato y su entorno: Tribus, brujos, niños, cazadores, mujeres con sus platos en los labios, abalorios, animales en su propio medio.. Hay un hombre negro desnudo sobre una cama de helechos en pleno bosque, que nada tiene que envidar al mejor descanso en colchón que tengamos pensado hacer en sueños. Tierras del Norte sin embargo carece de sujetos y es la propia naturaleza la protagonista: Utha, los cañones de Arizona…su desierto. En La Amazonía y el Pantanal, en cambio, el artista absorbe su ego y lo evoca con total lirismo buscando en si transmitir el espacio oriundo donde ha crecido. Es, a mi entender, la serie donde Salgado es más él mismo.
Leila Wanick, que hace de curadora en la muestra de Barcelona, afirma “Con su proyecto Génesis, Sebastião Salgado busca los orígenes del mundo y del planeta que habitamos. Un mundo que ha evolucionado durante miles de años antes de verse enfrentado al ritmo de la vida moderna.”. Dina Mitrani, galerista infatigable e inteligente y, en parte, pionera en mostrar lo mejor que se cuece hoy en el campo de la fotografía tanto local como internacionalmente en Miami, nos ha dado la primicia de ofrecer parte de una buena selección de una muestra que aún no ha sido expuesta en su totalidad en EE.UU y que acaba el 10 de este mes. ER