saltar al contenido
  • Miami
  • Barcelona
  • Caracas
  • Habana
  • Buenos Aires
  • Mexico

Septiembre 2024

ES TIEMPO DE QUE TE COMPADEZCAS DEL DESASOSIEGO Y OTROS POEMAS.

Es tiempo de que te compadezcas del desasosiego

 

Tanto creer que se vivió

Cortezas de caracoles agazapadas

Suelas soberbias

en el quirófano de los deudores

La divisa del sol

cae gota por el dedal enjuto

y se colma el cero

de hipotecados amaneceres

Recibo gestos lúgubres de viejos conocidos

Los pulmones, mis pulmones,

se azulan en verano

Perplejidad al cortar camino:

Sombras y reflejos acuchillados como lunas

Qué más ofrecer del corazón

ahora que las manos llenas

y las tuyas con un ramo? Más alto es el aire

que la torre de la cruz

donde el gorrión acampa.

Hoy hubo eclipse y no me enteré

 

Mis huesos son oscuras esmeraldas

 

Plunged into the dark furrows

Of the sea again

– James Wright

 

La vista ojerosa de un paladar

saborea líquenes amargos

 

(solo el fuego estirando hacia la nada

sus colmilludas fauces).

 

Al ver una mano frotar la corteza del amor

la piel sueña con paredes lisas

 

-sus ramas ventilan risa-

 

Tu silencio apilaba montones de cal en mi lengua.

 

Y ácidos jugos

fermentaban la savia:

un beso que darnos

cuando no bastaran las palabras.

 

Domingo 13

 

Otoño amanece con éste día nublado.

 

Es un instante en que se tira a dormir la palidez.

 

La grisura de los confines se aquieta y revela desnuda.

 

Tomados en préstamo a la luna

retazos de fulgor

aros incandescentes

sortijas de zorros blancos

 

a tu luz debido el afán de mirarte

al bosque de mi diáfana ceguera

a la voz que prendía fuego a la flor.

 

Desde abajo, en tierra: nadie lo sabe.

Del bostezo, un ave negra – ola enrollándose – se deshila

– o la noche avisando su llegada.

 

Chapultepec

 

Me siento llevado por una corriente de agua que no es.

Llevado por miles de caricias.

 

–El río, la suavidad en suma de la marea,

al descender el tiempo sobre mis labios,

hilando parodias, antifaces de lagunas–

 

Flota un ramo de girasoles en la fuente.

 

Sereno, amarillo, sin pesar

más que una hoja

yo me hundo,

me convierto al amor.

 

A la fe del ramo.

 

Todo es confuso como un buque entre la niebla

 

Alguien que no logro ver

pulsa una guitarra en mis sueños.

 

Se mece una figura inmensa de naufragio en la boca.

Y nos saluda el tehuén a nosotros dos,

pasajeros del aire.

 

Tibieza de una leche puesta a enfriar:

se adivina por las nubes

que el cielo tiene espalda

y largas pestañas como ríos.

 

Tenme aquí, en tus manos, sol.

 

Guárdame de cerrar los ojos cuando anochezca.

 

 

 

© All rights reserved José María Flores

José María Flores, estudiante de Letras Hispánicas, es artista gráfico, traductor y poeta. Reside actualmente en la ciudad de Guadalajara, estado de Jalisco, México. Obras de su autoría han sido publicadas en medios nacionales e internacionales. Puede ser consultada su publicación más reciente en la revista digital Hipérbole Frontera, año 4, número 32, bajo el título “Ser de esperanza y vida” (p. 7). Para mayores consultas, su correo electrónico es: elhombreconlaguitarraazul@gmail.com

Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.