Declaración de amor
En tu cuerpo está el placer
como en el cuchillo la muerte.
Eres directa y sola, simple
como tu arquetipo
y sin embargo
nueva.
Tu numerosa piel
estuvo en el espejo
de todos los que fuimos,
de los que ya serán.
Y sin embargo, Corazón
hoy no hay tristeza
en nuestra repetida fuga:
esta ilusión de novedad nos basta.
Declaration of love
Pleasure is within your body
like death is within the knife.
You are direct and alone, simple
as your archetype
and yet
you are new.
Your numerous skin
was in the mirror
of all of us who have been,
of all of those who will be.
However, my Heart
there is no sadness today
in our repeated fugue:
this illusion of novelty is enough.
Del placer
[…] la palabra placer abarca realidades contradictorias,
comporta a la vez las nociones de tibieza, dulzura, intimidad
de los cuerpos, y las de violencia, agonía y grito.
Margarite Yourcenar
Como el sonido a la cuerda,
tensa el placer la mano
de quien sostiene un filo.
Tensa el placer la mano
del que asfixia:
abre el placer la boca.
Abre el placer la boca,
dice nombres, dice
misas negras:
abre el placer los ojos
que miran un cadáver
abre el placer los ojos
y nos mira, oscuras bestias,
abandonándonos a todo
lo que abre.
On pleasure
[…] the word for pleasure covers contradictory
realities comprising notions of warmth, sweetness,
and intimacy of bodies, but also feelings of violence
and agony, and the sound of a cry.
Margarite Yourcenar
Like sound does to the string,
pleasure tightens the hand
of he who holds a blade.
Pleasure tenses the hand
of he who asphyxiates:
pleasure opens its mouth.
Pleasure opens its mouth
and says names, says
black masses:
pleasure opens the eyes
staring at a corpse
pleasure opens the eyes
and looks at us, dark animals
abandoning ourselves
to all it opens.
Testigo
Está bailando tu hija, dice mi esposa
y se toca la barriga.
Desde hace cinco meses
soy testigo
de lo que sucede ahí,
debajo de sus manos.
Mi esposa es una casa dentro de mi casa
y yo estoy fuera de mi propio corazón.
Seguro está contenta, dice
y yo sería capaz de renunciar a la poesía
a cambio de tener dentro de mí a mi hija,
de sentir la danza que las une
a todos los principios.
Pero la opción no existe
y hago lo que puedo: cocinar,
solucionar antojos, escribir el poema
en el que digo lo que veo
desde este lado de la piel
en que se encarna el misterio.
Y testimonio, con amorosa envidia
que un milagro cotidiano
es un milagro
y nada menos.
Witness
Your daughter is dancing, says my wife
touching her belly.
For the past five months
I have been a witness
of what happens there,
under her hands.
My wife is a house inside my house
and I am outside of my own heart.
I am sure she is happy, she says
and I would give up poetry
in exchange for having, inside me, my daughter.
For feeling that dance that bonds them
to all beginnings.
But the option does not exist
and I do what I can:
cooking, fulfilling cravings,
writing a poem in which I say
what I can see
from this side of the skin
in which mystery embodies itself.
And I testify, with loving envy,
that an everyday miracle
is a miracle
and nothing less.
Victoria del amor
[Yo] que me niego a reconocer los hechos… Rafael Cadenas, Derrota
Yo que comprendo más que nadie a los que lloran en los aeropuertos que he visto ya todos los rostros del amor cuando se marcha que me rio de mí me levantaré del polvo para decir tu nombre y sonreír con expresión de enfermo, todavía. |
Victory of love
[I] who refuse to recognize the facts… Rafael Cadenas, Defeat
I, who fall in love with unprecedented women who understand, more than anyone, those who cry at airports who have seen all the faces of love while it goes away who have said “forever” and then have let go of her hands who still believe that love exists who have been loved, hated and forgotten by the most just of all women who laugh at myself who am the “it will pass”, “it was never my intention”, “it’s all my fault” who still believes in hope who struggle to have an acceptable smile who sometimes pity whoever expects something of me who don’t deserve anything who write out of shame who arrive at a poem like someone who falls down will rise from the dust to say your name and smile with the expression of a madman, still in love.
|
© All rights reserved Manuel Iris
Manuel Iris (México, 1983). Es el Poeta Laureado de Cincinnati, Ohio.
Premio Nacional de Poesía Mérida (2009) por su libro Cuaderno de los sueños (México, Fondo Editorial Tierra Adentro 2009), Premio Regional de Poesía Rodulfo Figueroa por su libro Los disfraces del fuego (México, Ediciones Atrasalante, 2014). Es igualmente coautor, junto con el poeta brasileño Floriano Martins, de Overnight Medley (Brasil, ARC Edições, 2014), y compilador de En la orilla del silencio, ensayos sobre Alí Chumacero (Tierra Adentro, 2012). Ha publicado poesía, ensayo y traducción en revistas como Tierra Adentro (México), Casa de las Américas (Cuba), Sibila (España), Mapocho (Chile), Triplo V (Portugal) y Líneas (Francia).
Poemas suyos han sido incluidos en varias antologías, destacando Postal de Oleaje, poetas mexicanos y colombianos nacidos en los 80, publicada al mismo tiempo en México y Colombia, la también binacional Espejo de doble filo: antología de poesía sobre la violencia México-Colombia, y la antología continental Voces de América Latina, publicada en Estados Unidos por la dominicana María Palitachi.
En 2016 las Ediciones del movimiento poético de Maracaibo, en Venezuela, y las Ediciones la Fragua, en El Salvador, publicaron respectivamente La luz desnuda y Frente al misterio, antologías personales de su poesía.