Ayer estuvimos paseando todo el día.
El cielo me cantaba la luz de tus ojos,
los árboles soplaban el dulce aroma de tu pelo;
el río, con su fluir cristalino, acababa su sentido en tu sonrisa,
las hojas caídas del otoño terroso
me susurraban en la intimidad el color de tu cintura.
Las nubes me explicaban el enlazarse de nuestras manos,
el viento los nudos esforzados de
brazos y nuestras piernas ansiosos;
y la oscuridad de la noche, ya al ponerse el sol,
con su armonía y el dulce misterio de su silencio,
me descubrió el secreto de tu vientre,
ayer, mientras estuvimos paseando con tu ausencia,
acompañado sólo de tu recuerdo.
Quiero vivir en tu cuerpo,
caminar con tus pies, tocar
con tus manos, mirar con tus ojos, sonreír
con tus labios, besar
con tu sonrisa, amar con tus brazos.
Quiero vivir en tu cuerpo,
vivir en tus voces, recorrer el camino
de tus cejas, bañarme en el mar
de tus ojos, sonreír en la selva
de tu cabello.
Quiero vivir en tu cuerpo,
besar las nubes con tus pies, bañarme
en tus labios bajo el sol
de tus ojos, acariciar la música de tus labios
con tus oídos, recorrer con tus pies la sonrisa
de tus ojos, bañarme en tus besos,
caminar infinitamente entre la selva alada
de tus brazos.
Quiero vivir en tu cuerpo:
ojear tu sonrisa, bracear tus besos,
labiar tu mar, cabellear tu camino,
oír tus pies y la selva de tus besos,
hasta alcanzar la voz de tus nubes.
REFUGIO AMOR
Beso tu cuerpo encendido
mientras fuera arde el dolor;
hundo mi piel sobre tu carne sedienta,
mientras el fuego ahoga el llanto
de mil vidas sin mañana.
Ardo en tu cuerpo encendido
mientras fuera explota, hidrópico, el odio.
No hay agua que apague sus gritos
mientras mis besos desgarran tus labios
y mis manos (mis pies, mis ojos)
siembran tu cuerpo
arado a mordiscos de azucenas
mientras se diluye al fondo la desolada piel del mundo.
No podré perdonar al mundo
que me hizo conocer tu caricia
para después ir apagándomela con la lentitud
del último suspiro,
flor que se cierra en la noche;
que me hizo conocer cómo al acariciar tu cuerpo
(espalda tierna, hombros de luz)
crecía la hierba bajo mi deseo.
No podré perdonar al mundo
porque me abrió el regalo de tu voz,
y el aroma de tu sombra,
porque me abrazó con tu aliento
y me guio hasta el paraíso
donde ardió la herida
de la carne abierta
(verde amor, ternura satisfecha,
dulzor caricia, mi sed en tus labios),
para dejarme después,
en el silencio de mi agonía,
atada a la soledad del recuerdo,
hierba segada, aliento helado,
en el dolor de esta sombra oscura.
LA MUERTE, DICEN QUE LA PAZ
y será así: rodeada de todos
–o de nadie– en medio de la noche
–quizá la tarde, tal vez la mañana–,
después de recordar cuando yo –o mi hermano–
nacimos, después de sentir la caricia
(ya lejana) de papá muerto hace años,
solo vivo en nuestros recuerdos y sus sensaciones
cada día más vivas (lo único vivo que queda vivo de ella),
el susurro recobrado de su mejilla tanto tiempo ausente,
el amor devuelto en los labios de papá;
después de haber descubierto
(miserable consciencia)
que su dios la había dejado abandonada en la miseria
de la nada,
del dolor y de la decrepitud, de la angustia
de verse día a día cada vez menos ella
y más nada y más tierra
(más dolor y apenas respiración, solo mirada, todo preguntas),
dejará de respirar,
dejará de sentir la angustia de haber sido traicionada
–¿dónde está el paraíso prometido?–,
y llegará la ausencia de dolor, la mirada a punto de cerrarse,
y la certeza al fin de ser ya solo ceniza consumida.
Y entonces será la oscuridad. Y el silencio.
Dicen que la paz
© All rights reserved Jorge León Gustà
Jorge León Gustà Nacido en Barcelona, 1962. Doctor en Filología Hispánica por la Universidad de Barcelona.
Catedrático de Instituto en Barcelona. Asesor Técnico pedagógico del Departamento de Educación de la Generalitat de Cataluña.
En prosa ha publicado “El complot”, cuento incluido en el volumen colectivo Cuentos Bi, de Magma editorial, 2019, la novela Gotas de lluvia, novela, Libros Indie, 2020 y el libro de viajes junto con Jaime Martínez Sallés Un veterinario en la nieve, Godall ediciones, 2017
También ha publicado poesía en diferentes revistas literarias: Salina, Las nueve musas, ha participado en la exposición de fotografía y poesía Tocar la luz, junto a Claudia León Mas (fotografía) y ha participado en la antología L’empremtad’unapassió”, Maridaje de vino, literatura y grabados, Barcelona, 2016. Es autor de los poemarios Breves fragmentos rotos contra el cielo, El llopferotge, Gerona, 2014 y El día y todas las cosas me esperan, Ed. Nazarí, Granada, 2022.
Por otro lado esautor en colaboración de más de veinte manuales de educación en las editoriales SM, Cruïlla, Verbum, Castellnou.
Como investigador y editor de clásicos de la literatura española. Ha publicado ediciones de clásicos y estudios de diferentes ámbitos: Lope de Vega, Los melindres de Belisa, incluida en Parte IX de Comedias, Editorial Milenio, 2007; Fernando de Rojas, La Celestina, Ed. La Galera, 2013; Mosquera de Figueroa, Poesía completa, Alfar, Sevilla, 2015; Cuatro entremeses inéditos del Siglo de Oro, Verbum ed.2019; “Un soneto me manda hacer Violante…” y otras historias de la Literatura, Los papeles de Brighton, Madrid, 2023.