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25⁰ ANIVERSARIO. Felisa Calle Fernández

  A Silvia le llegó un WhatsApp de buena mañana, mientras se preparaba para ir al trabajo. Decía que era Sonia Pérez, compañera del insti. Silvia regresó a 1992, a su instituto recién construido, nuevecito, cuando los reunieron un día de septiembre en el patio de uno de los lugares más queridos para ella y … Continuado

ME GUSTA CONDUCIR. David Toledano Salguero

  Me gusta conducir. Lo admito: me gusta mucho.   Algunos eligen ir al cine, jugar al baloncesto o dibujar. Yo disfruto conduciendo. Puse las manos al volante de mi primer bólido cuando apenas podía sostenerme en pie. Tendría un par de años y ya sabía que aquel monstruo de metal y yo nos llevaríamos … Continuado

AMARGAS VISIONES. Sonia Ramón

  Sé exactamente cuándo comenzó. El lunes primero de abril Teo movió el dial y se detuvo en Johnny B. Goode de Chuck Berry, el riff de guitarra inicial, no sé cómo, trajo a mi boca un potente sabor a pan de almendras que me acompañó a lo largo de la canción, es decir, dos minutos … Continuado

SOY UN NIÑO… (abril 2009).

En esta época soy niño, camino por el borde de la acera. Soy un crío y tengo un conejo de indias que me sigue a todas partes, cuando me paro se sienta en mi pie de madera. En el barrio me llaman el chico del cobaya…pero además poseo una tortuga y dos periquitos, uno amarillo … Continuado

INTRUSIONES. Emilio Palomino

Al sentir los dedos de su hija palpar su barbilla, mi hermano, Daniel, empezó a llorar. Siempre lloraba cuando tenía miedo. Mi mamá se acercó a abrazarlo, intentando compartir el gozo de lo que confundió como lágrimas de felicidad. Crucé los ojos con los de Daniel un instante. Imagino me vio difusa a través de … Continuado

HISTORIA NO ESCRITA DE UNA PELOTA. David Toledano Salguero

Esta es la historia de una pelota, que ahora se hundía solitaria en el mar; que se había precipitado por un barranco, que había rodado entre la hierba alta de un islote, que había resbalado de las fauces de un perro, que había sido robada de los dedos temblorosos de una vieja con la mirada … Continuado

GORJEO. Darío Fritz

La mujer, delgada, rostro seco, ojo de anguila, abre la puerta de la calle. Un mundo de malvones, buganvilias, cactus espinosos, flores de dragón lila y amarillo. Bajo el portal cubierto, de columnas inglesas, baldosas enceradas, una rumba de colores a mitad de la mañana. Perfume de begonias. Del cielo azul de primavera desploman rayos … Continuado

NOVIEMBRE CRUEL. Antonio López-Peláez Manoja

Me lo dijeron cuando volví de la ciudad, ya de noche cerrada. Lo habían encontrado junto al arroyo, no muy lejos de la majada. Nadie sabía qué hacer con él, de manera que lo habían dejado allí a la espera de que yo llegara y decidiera. Así pues, me puse las botas de serraje, mandé … Continuado

¿QUÉ PASA CUANDO SIGUEN LAS INSTRUCCIONES? Nacho Bengoetxea

— Pulse enter Y pulsé enter. Tal como decía la pantalla. Ni siquiera tenía que escribir nada. Solo presionar desplazando mi mano hacia la derecha para pulsar con el índice. Seguía mostrando “Pulse enter”, pero ya no parpadeaba el cursor. Esperé diez segundos. Luego otros diez. Sin movimiento. Esperé por si se había ido Internet, … Continuado

ALMA. Ricardo Alberto

Han pasado más de 30 años, pero aún recuerdo aquel día como si fuera ayer. Mi hermana entró corriendo, gritando. —¡Amá, amá! Juan, el teporochito… Yo me encontraba en mi cuarto, leyendo unos cuentos de terror que mi papá me había traído de la ciudad el día anterior. Salí a ver qué pasaba. —¿Qué pasó?, … Continuado

EL CHICO DEL PISO DE ARRIBA… (Otoño de 1989)

Me lo encontré por la mañana en el rellano de la escalera de casa, oí sus pasos mientras cerraba la puerta con llave. Alguien, a mi espalda, me saludó. Yo, como señal de cortesía, le devolví el “buenos días” sin prestar demasiada atención, hasta que me giré y lo vi, miré aquello y me impresionó. … Continuado

DOS MICRORRELATOS DE JUAN CARLOS VÁSQUEZ

Saltar juntos   Inna traía aparejada una comprensión extra mundanal que no tenía nada en común con las mentes terrenales. Al desahogarse salió de los torvos riscos, de los espacios que separan a las nebulosas de la línea del abismo. Su rostro sombrío era hermoso y lleno de sabiduría, y sus refulgentes e intensos ojos … Continuado

LA BELLEZA AMERICANA. João Melo. Traducción de L. F. Lomelí

Doña Augusta se había ido para América —era así que ella misma, como mucha gente buena, se refería al país de Lincoln y Roosevelt; pero también, desgraciadamente, de McCarthy y Bush— hacía un año. Sin embargo, y al contrario de mucha gente, igualmente buena, no fue en busca del paraíso prometido por la Gran Manzana. … Continuado

AMARU. Raúl Ariel Victoriano

Como una pena… El hombre viejo se deja llevar por el movimiento del agua. Tiene las cicatrices blancas de los raspones de la tristeza y un susto oscuro le tiembla en el pulso. Los brazos clavan el remo y evitan el bamboleo; el pie contra la damajuana impide el derrame del vino tinto en el … Continuado

VISITAS. Antonio de la Fuente Figuero

Mientras mi padre se aferraba a una máquina para seguir respirando tuve que aprender a cuidar el jardín de la casa. Conectaba el riego automático algo más de media hora cada tarde, pasaba el cortacésped un par de veces a la semana y por las noches revisaba la efectividad de las trampas para los topillos. … Continuado

UN HOMBRE, UN IDIOMA. César Holgado Morcillo

  Conocí a Abderrahman Salguero cuando aún era Ramón Salguero, y ambos compartíamos patio, bar y estudios de Filología. En aquella época éramos unos ilusos, y en vez de estudiar solo por obtener el diploma, también queríamos aprender y saber el porqué de los asuntos. A esto dedicábamos largas sesiones en la playa de la … Continuado

MI VIDA EN SOLFA

  Mi marido me dijo que cerrara los ojos y me llevó al comedor. Cuando llegamos, los abrí  y se me escapó un grito al ver lo que tenía delante de mí. ‒Como sé que tocabas el piano de niña, pensé que era hora de recuperar ese sueño de infancia. Feliz cumpleaños, cariño. Lloré. Yo … Continuado

EL SOLDADO. Juan Fernando Batres Barrios

Maldito sea el soldado que vuelva las armas contra su pueblo. Simón Bolívar Es de noche, en medio de la selva tropical, lloviendo como es costumbre por esta época del año. Agazapado como un animal herido y temblando del frío está José María, Chema como todos los que saben su nombre le llaman, tratando de … Continuado

NO TE EXTRAÑO. Miguel Ángel Valencia Camacho.

No pienses que por escribir sobre ti aun te extraño. Es solo que ya no hay a quien contarle mis sueños y mis pesadillas, no recargo mi teléfono porque no le llamo a nadie, ya no tengo que escribir un mensaje de “llegando” cuando estoy fuera de mi casa. No te extraño. Solo que ya … Continuado

MIÉNTEME, QUE ME GUSTA. . . Roberto Garcés Marrero

Solo quería una mentira minúscula. ¿Era tan difícil? Tu franqueza a ultranza siempre me pareció burda, una increíble muestra de mal gusto en una persona refinada como tú. Nunca comprendiste que se miente por invención, por exageración, por tergiversación, pero no por omisión. Callar no es mentir. No debiste creerme cuando te pedí la Verdad. … Continuado

Y TODO SE AQUIETA. Alicia Grinbank

Llegó a la playa con una bikini amarilla. Ya de entrada me pareció una tilinga: combinar el amarillo canario de la bikini con ese pelo rubio platinado, es todo un indicador.   Papá la había invitado a pasar quince días con nosotros y decía que era mejor así: conocerla en vacaciones para quitarle formalidad al asunto. … Continuado

LÁGRIMAS DE DIOS. Victoria Mulville

Dicen que las perlas están hechas de luz de luna. En las noches de plenilunio, los moluscos se abren para dejar entrar los destellos. Para mí, las perlas son lágrimas de Dios. Es que Dios también llora, pero lo hace sobre el mar para esconder la vergüenza. Somos una tripulación de diez. El capitán, Ali Suwaidi, va sentado bajo la … Continuado

SIN ALAS. Raúl Ariel Victoriano

De chico me gustaba jugar con el aire. Aprendí a hacerlo en la copa del fresno, el fresno solitario que está en el fondo del terreno, contra el alambrado, cerca de la orilla del río. Luego de la muerte de mi padre, al inicio de la primavera lo plantamos de retoño, con mi madre. Ella … Continuado

ASÍ NOMÁS. Eva Leticia Brito

Dedicado a Abner   Fotografía del acervo de Carlos Abraham. Habían pasado tres días desde que se le cortó el cuerpo en mil pedazos a mi Juan. Se quejaba de mareos, perdió los sentidos del gusto y el olfato y me aseguró que la cabeza le iba a estallar como “marcianito”, esos fuegos pirotécnicos en … Continuado

JAQUE MATE. Ilse Rivas Torres

En su grave rincón, los jugadores rigen las lentas piezas. El tablero los demora hasta el alba en su severo ámbito en que se odian dos colores. Jorge Luis Borges ¿Cuántos días más va a durar esta guerra silenciosa si nuestro destino ya está sellado? No te hagas pendejo, sé lo que estás pensando. Ni … Continuado

DOS MICRORRELATOS DE RAFA MELLADO.

CRISIS  (para Sandra) Un dedo varonil con un sello de oro en el botón del ascensor. —Vamos, ricura, hazlo. —Suben—. —Estás loca, ¿lo sabías? —Hay poco tiempo—. —¡Deprisa! Sin preámbulos: uno, dos… Mudan gestos, palabras, pantis, suéter, blusa… Se destetan, se desbaban, se desbragan. Se desean como perras, o como amas de cría, voraces. Isidoro … Continuado

LA CIUDAD DEL INVIERNO ETERNO. Wilfrido Pabón

Me encontraba bastante distraído mirándole el trasero a la azafata, cuando el pasajero de al lado me tocó el cuello para indicarme que mi nariz sainaba. Casi automáticamente, varias blasfemias se apoderaron con vehemencia de mi lengua. Mientras me disponía a inclinar la cabeza hacia atrás, de reojo noté como estaba salpicada mi bufanda, solo … Continuado

LA SILLA SIN RESPALDO. Eva Leticia Brito Benítez

Tu cuerpo se constela de signos verdes como el cuerpo del árbol de renuevos. No te importe tanta pequeña cicatriz luminosa: mira al cielo y su verde tatuaje de estrellas. Octavio Paz (“Escrito con tinta verde”) Fue el pasado mes de agosto cuando pasé frente al local de don Mariano, el viejo carpintero que conozco … Continuado

EL PUMA. Lucía Oliván Santaliestra

El puma se tambaleó y profirió varios alaridos. La herida que le habían propinado era profunda. Intentó lamérsela. Sin embargo, la sangre que manaba de esta era muy abundante y no pudo detenerla. Respiraba con dificultad y su corazón latía con lentitud. Poco a poco, sintió que le fallaba esa fortaleza y vigor que tanto … Continuado