Sin adjetivos
El paisaje de mi Castilla
no necesita adjetivos,
pero no sé qué fuerza me lleva a que manen
tras las colinas.
Mirad,
haré
un esfuerzo.
Lomas de Soria.
Falta de vigor en su reborde Cebollera.
Cerros.
Ríos que surcan parameras,
mientras el Duero labra valles encajonados
allá con Zamora y Salamanca.
El páramo se convierte en espigón,
nombres donde los zócalos y cerros
cantan al granito.
Castilla,
La de La Babia,
la de Navarredonda,
la de Castrogeriz y Frómista,
la depresiva del Duero,
la de los Campos de Soria,
la del invierno,
la de la encina,
la del jabalí,
la del águila, el buitre y el halcón.
El paisaje de mi Castilla
no necesita adjetivos
entre la perdiz roja y la paloma torcaz.
Azul, grisácea, purpúrea.
Sin adjetivos.
Castilla, roca y verbo, editorial Celya, Salamanca , 2007
Silencio
Ahora, el silencio debería estar prohibido.
Porque ahora el silencio no es valor de respeto.
Sino señal de retirada.
Y en esta batalla abocará
en la catástrofe toda
retirada.
Carcoma,
carcoma, en silencio o contra
el silencio, va abriendo una peste
que pide a gritos luchar contra
el silencio.
Dos silencios. El de los que piden
paciencia y el de los que, en la densidad
del miedo, piden la palabra
en tiempos revueltos.
El aire que se respira, editorial Huerga y Fierro, Madrid, 2012
Y estoy aquí, ignaro,
ser en el Ser,
ante, con, contra, en, para, sobre
el Ser,
y estoy,
mínima partícula, en un mar inabarcable.
Arrinconadas barreras,
aprovecho el privilegio
y dejo nota escrita del particular.
También aunque fuera sueño sería
verdad.
Pues todo ideal es un testimonio.
(…)
Y yo me iré.
Y la fusión en las estrellas,
también.
Todo es cuestión de tiempo.
La Física del Ser, Huerga y Fierro, Madrid, 2015
Palabra en el aire
hoy no me sale la palabra
me esfuerzo y nada
quizá no hay palabras
para lo que trae el aire
y entonces qué hago
mirar
ver
esperar
con las palabras flotando
hasta que una caiga al suelo
y bajaré a recogerla
para que la fuente vuelva a manar
acentos
mirar
ver
esperar
hasta que la palabra regrese triunfante
Inédito, Barcelona, 21 de marzo de 2020
© All rights reserved Silvano Andrés de la Morena
Silvano Andrés de la Morena (Cuevas de Ayllón –Soria- 1953), profesor y poeta. Licenciado en Filología Hispánica por la Universidad de Barcelona, dedica su vida a la docencia, escritura e investigación.
Durante casi veinte años, ha mantenido, miércoles y domingos, la sección “Caleidoscopio”, del periódico Heraldo de Soria, y ha dirigido la revista de investigación etnográfica Granzas de yeros, de Cuevas de Ayllón.
Desde 2003 ha sido miembro activo de la Asociación Cultural “Soria Edita”, donde ha coordinado varias publicaciones colectivas y dirigido una de sus secciones.
Es autor de varias obras de investigación; ha realizado numerosas ediciones críticas y, asimismo, ha prologado libros de poesía de distintos autores.
Obra poética
Aquietando luz (Ayuntamiento de Soria, 2001).
Movimiento de traslación (Ediciones Granzas de yeros, 2002).
Cuchillos de mudanza (Ediciones del 4 de agosto, Logroño, 2004).
Castilla, roca y verbo (Celya, Salamanca, 2007).
La línea del tiemp, (Millán Las Heras Ediciones MLH, Soria, 2011).
El aire que se respira (Editorial Huerga y Fierro, Madrid, 2012.
La Física del Ser (Editorial Huerga y Fierro, Madrid, 2015).
Antologías poéticas
Cierzo soriano. Poetas para el siglo XXI (Soria Edita, 2003).
Vida de perros (Editorial Buscarini, Logroño, 2007).
Poetas a orillas de Machado (Abada Editores, Madrid, 2010).
50 Poetas Contemporáneos de Castilla y León (Ediciones Hontanar, León 2011).
“¿Me oye, don Antonio?”, Revista Turia, número 104, noviembre de 2012.
Cien años de Soria en la poesía, Diputación de Soria, 2013.
Escritores recónditos, Parnass Ediciones, 2016.
Las voces de Ariadna, Parnass Ediciones, 2018.